Los idóneos, para una nueva burocracia en la SEP Luis Hernández Montalvo

Los idóneos, para una nueva burocracia en la SEP

Luis Hernández Montalvo

“La burocracia define ella misma su modo de reclutamiento, sus relaciones internas, su sistema de promoción, sus condiciones de trabajo y su estatuto. En este sentido, no depende de modo alguno de la colectividad que, sin embargo, la mantiene por medio del impuesto y todas las ventajas que debe acordarle. De esa manera, constituye, como las viejas clases dominantes, un poder absoluto, pues es a la vez independiente y soberana” Michel Labrot, Pedagogía Institucional, La Escuela hacia la autogestión, Humanitas, Buenos Aires, 1974.

Vivimos días de escándalo, de violencia y muerte. Las instituciones de la República se tambalean y las fronteras entre la delincuencia organizada y los hombres de poder en el país se han borrado. Basta ver un debate en el Canal del Congreso para saber el papel que juegan los hombres y mujeres del Congreso de la Unión y los intereses reales representados bajo las máscaras de ideología y programa de los partidos políticos.

Jueces y carceleros aparecen como cómplices impunes, como colaboradores celosos de los criminales y delincuentes de todo tipo. La opulencia y el despilfarro del poder público contrasta con el incremento del hambre de un pueblo atrapado como audiencia de las televisoras que ante los cambios tecnológicos, hacen fila para recibir el regalo de una pantalla plana y permanezcan conectados en una realidad virtual que no es la suya. Mientras tanto, los grandes capitales se esfuman del país, y provoca una reducción aún más drástica de los salarios y los servicios que atienden la salud, la educación, la casa, el vestido y el sustento de más de cien millones de mexicanos.

El desplome de los precios del petróleo a nivel global y la venta de nuestros recursos naturales a las grandes corporaciones económicas que dominan la economía planetaria nos conducen ya a una nueva devaluación de nuestra moneda frente al dólar; pero este tema, es un asunto de los economistas y de los estudiosos de las finanzas, yo solo los menciono, como fenómenos que enmarcan el escenario propiciatorio de lo que viene ocurriendo con los profesores y su fuente de trabajo, la Escuela Pública. El proceso ha sido de larga duración para una reforma como la que nos ha tocado vivir en México. A partir de 1992, se acentuaron los discursos modernizadores con la firma del Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica ANMEB y que el   Profesor Renán Vega de la UPN de Colombia escribe al respecto:

“El proceso de mercantilización de la educación viene acompañado de una nueva lengua, que aplicada a la educación la empobrece en una forma dramática: la escuela es una empresa, los rectores son administradores, los profesores son formadores de capital humano, los estudiantes son usuarios, los padres de familia son clientes y se exalta la noción gerencial de cómo resultado de la lógica costo-beneficio. Según esta terminología la escuela no es un lugar en donde los individuos se forman culturalmente para la vida, sino que es una  empresa del conocimiento”.

Jueces, burócratas y miembros del Congreso de la Unión han dispuesto las nuevas reglas del trabajo docente esgrimiendo y justificando los atropellos a las leyes laborales, el “interés superior de los niños a recibir una educación de calidad” pero ignoran las estadísticas de pobreza imperante y ahora, podemos formular alguna opinión inicial de los primeros resultados en la aplicación de las reformas al artículo 3º. Constitucional. A éste modelo de gestión, el maestro Pedro Medina Calderón lo denomina: el Modelo Burocrático-Legislativo ya que se impone como acto de autoridad sin discutirlo con los implicados: sin convencer a la sociedad, a los Maestros, los padres de familia, los educandos.

Lo señalado por Labrot en la cita de esta nota, es ahora un fenómeno global; que reproduce nuevos patrones de vida y de organización a las instituciones nacionales, incluso en el discurso y en el rol de los hombres y mujeres que por varias décadas, representaron el gremio de mayor respeto social. En febrero de 2013 se reformó el artículo 3º. Y se adicionó un párrafo tercero, un inciso d).- al párrafo II del artículo 3º quedando como sigue:

“Adicionalmente, el ingreso al servicio docente y la promoción a cargos con funciones de dirección o de supervisión en la educación básica y media superior que imparta el Estado, se llevarán a cabo mediante concursos de oposición que garanticen la idoneidad de los conocimientos y capacidades que correspondan. La ley reglamentaria fijará los criterios, los términos y condiciones de la evaluación obligatoria para el ingreso, la promoción, el reconocimiento y la permanencia en el servicio profesional con pleno respeto a los derechos constitucionales de los trabajadores de la educación. Serán nulos todos los ingresos y promociones que no sean otorgados conforme a la ley…”

 Por lo tanto, cuando los profesores se oponen a lo que consideran una injusticia; se enfrentan a la Ley de la Constitución y a todo el aparato del Estado. Los primeros datos disponibles, nos indican ya, la dimensión de los efectos reales de lo que significará para los trabajadores dichos procesos de evaluación, más allá de los discursos políticos de funcionarios, legisladores, jueces y líderes sindicales oficialistas:

El profesor nayarita Armando Acosta elaboró una tabla que muestra el comportamiento de los resultados en el examen de promoción a una de las plazas ofertadas en la convocatoria del Servicio Profesional Docente a las plazas de director de primaria federal. Estos son los resultados. Total de plazas ofertadas en la convocatoria: 2008; del número de concursantes en el examen, resultaron idóneos 3698 y del total de idóneos, 1690 concursantes, no cuentan con plaza, lo que hace suponer, que un número importante de los “idóneos”, son concursantes externos. Otro dato más: de los 3698 de los que resultaron idóneos, se reparten por grupos de desempeño. En el grupo “A”,  284, en el grupo “B”, 976 y 2438 se ubicaron en el nivel “C”.

El pasado 26 de julio se publicó el comunicado 208 de la SEP con los resultados del proceso de promoción a cargos con funciones directivas. De esta información, nos ocuparemos en la siguiente semana. Por ahora basta decir a manera de opinión inicial, que pese a todo lo que se cuestionó de los métodos viciados del escalafón de mandos de la SEP hasta antes de las reformas y que básicamente controló el SNTE en sus distintas y muy complejas vertientes y expresiones a nivel nacional –una de ellas, la de la CNTE del sur del país-, si, pese a la venta de los ascensos a Director de Escuela, Supervisor, Jefes de Sector y Apoyos Técnico-Pedagógicos, si, aún en este espacio de corrupción, aproximadamente el cincuenta por ciento de ellos o un porcentaje importante, resultaron idóneos.

Pero el problema no es ese, el problema es que al derogar el Escalafón de mandos de la SEP-SNTE, ahora viene el desmantelamiento de la estructura heredada de esta relación bilateral de la administración con el sindicato para dar paso a una nueva realidad gestionaría  en donde los directores no tengan la mínima idea gremialista, el mínimo y nulo gesto de solidaridad con los profesores. La nueva estructura burocrática solo responderá a un mando único y que en forma piramidal, descenderá del encargado del Ejecutivo en turno hasta el maestro de escuela. Una nueva era autoritaria y centralista ya se ensaya con los Consejos Escolares. (1 de agosto de 2015).