Translate

domingo, 24 de febrero de 2013

Comisión de educación pública y servicios educativos Luis Hernández Montalvo


Comisión de educación pública y servicios educativos

Luis Hernández Montalvo

Saben que el docente es controlado con severidad, juzgado, reglamentado, puesto en un cepo”.
Michel Labrot, Pedagogía institucional.

El pleito entre dos personajes de la política nacional: por un lado, la señora Elba Esther Gordillo, Presidenta del Consejo General Sindical para el Fortalecimiento de la Educación Pública del SNTE y por otro, el señor Emilio Chuayffet, Secretario de Educación Pública; hicieron visibles  las contradicciones y la ruptura de la burocracia educativa que actuaba como un solo cuerpo articulado en la conducción de los asuntos de la administración de la educación y de la supuesta defensa de los intereses comunes de los trabajadores y tienen como función, como misión básica el control de los profesores.

Fueron dos instituciones trabajando simbióticamente, borrando las fronteras de competencia de quienes representaban al patrón y de quienes representaban al sindicato; dicho de otra manera: fueron “juez y parte”, “dos instituciones y una sola burocracia”. Sus odios personales y de facción ya fueron muy lejos en perjuicio de los asuntos públicos y del interés común de la sociedad; pero también, está dejando saldos positivos entre el magisterio.

Los profesores de educación básica o el magisterio como gremio; están llenando el vacío que deja la burocracia en cuanto a iniciativas por convertir a la educación en un espacio de disputa política e ideológica de fuerte confrontación en lo que ya se perfila la construcción de una clase ideológica al margen de los canales políticos–burocráticos tradicionales.

Los grupos de maestros se reúnen por separado y en lo que va de los meses de enero y febrero, surgieron iniciativas de talleres, seminarios, congresos nacionales e internacionales para analizar el impacto de las políticas que vendrán una vez que se ha decretado constitucional la reforma a los artículos 3º y 73.

Solo por mencionar algunas de estas iniciativas. Profesores de instituciones públicas y privadas han convocado al Primer Congreso Internacional de Transformación Educativa; de los estados de Tabasco y Veracruz, convocan al Seminario Internacional de Liderazgo Sindical y Calidad Educativa, otros convocan al Foro Estatal de Educación: El Impacto Jurídico Laboral y Pedagógico de la Reforma de los Artículos 3º y 73 de la Constitución; en el estado de Veracruz aparece la Convocatoria: Campaña Nacional para Incidir en la Definición de la Política Educativa; también crecen los pronunciamientos sindicales al margen de las estructuras tradicionales del SNTE; otros van más lejos y construyen La Red para el Diálogo entre Educadores de América Latina y el Caribe; también surgen Los Programas Nacionales Alternativos a la Reforma Educativa; los que menos, convocan al Ciclo de Conferencias: Miradas a la Reforma Educativa y creo yo, por primera vez los legisladores asisten a las reuniones convocadas por los educadores.

Los profesores de educación básica están aprendiendo demasiado rápido el uso de las tecnologías de la comunicación y su aplicación en las redes sociales resultan aprendizajes reamente significativos para un magisterio tradicionalmente controlado y desinformado; porque fundamentalmente, están rompiendo las ataduras de setenta años de corporativismo sindical, de los intentos por silenciarlos en asuntos básicos de su materia de trabajo y de sus competencias profesionales.

Mientras en la cúspide de la pirámide educativa; los miembros de las élites burocráticas se pelean e insisten en aplicar una nueva política educativa que excluye a los profesores en su derecho a opinar; con desplantes autoritarios como lo confirman las palabras del titular de la Secretaría de Educación Pública, Emilio Chuayffet “…quien hace unos días dio a entender –durante una comparecencia en el Senado– que el gobierno decidirá unilateralmente qué sectores del magisterio se incorporarán a la discusión de la reforma educativa y sus leyes reglamentarias. Tanto más preocupante resulta que la sordera del grupo en el poder se haga acompañar de una inocultable vocación punitiva, como las advertencias formuladas por el propio secretario de que se aplicará la ley en contra de los maestros que paren labores en protesta por la reforma educativa” editoriales como el de La Jornada, ilustran lo que sucede en el sector:


Mientras el señor Emilio Chuayffet se enreda en sus fobias e ignorancia; los diputados de la Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos advierten que la propaganda no está dando los resultados ni con el magisterio ni en la sociedad y parece preocuparles el descontento creciente que se expresa en protestas en casi todo el territorio nacional.

La Comisión de Educación Pública y Servicios Educativos en su reunión ordinaria del 13 del mes y año en curso; acordaron reunirse en cada una de las entidades federativas del país con los grupos de profesores inconformes para explicarles las bondades de las reformas y la “preservación de sus derechos como trabajadores de la educación”.

En sus intervenciones, puedo advertir que varios de ellos son profesores de educación básica; otros de educación superior, y lo mismo provienen de escuelas públicas que de escuelas privadas; no me parecen personajes fogueados en el debate parlamentario, pero me parecen hombres y mujeres de buena voluntad que dicen estar preocupados y por eso acuerdan una agenda de trabajo en los estados.

Dicen los diputados que los maestros están preocupados por la palabra “permanencia” en la reforma y al igual que el magisterio se preguntan si el señor Emilio Chuayffet tiene el mismo concepto que ellos tienen sobre la palabra “permanencia”.

Dicen que se deben organizar talleres con los maestros y padres de familia, construir una ruta de foros y un programa de reuniones; yo digo y advierto que en estos señores diputados, aparte de sus limitaciones en la argumentación parlamentaria, pecan de ingenuidad; repito, aunque se conduzcan de buena voluntad.

 La moneda está echada al aire y muy pronto, dos visiones se verán confrontadas; la de la burocracia que parece dictarle al docente su papel del quehacer educativo y la visión de un magisterio emergente que viene anunciando la creación de una nueva fuerza histórica. Michel Labrot expresa en su Pedagogía Institucional los siguientes conceptos: “El docente tiene tres objetivos principales que definen toda su pedagogía: la conformidad con el programa, la obtención de obediencia y el buen éxito en los exámenes”. Termino  diciendo: dos siglos contemplan la decisión del magisterio mexicano por construir una educación pública; y en las mejores tradiciones de la República, está sin duda, el profesor de educación básica haciendo su mejor papel. (24-02-2013).



 

 

 

  

 

No hay comentarios: