Translate

sábado, 17 de agosto de 2013

Los Consejos Técnicos Escolares desde su interior Silvia Arévalo

Estimado Sr. Luis Hernández:

Soy la Profa. Silvia Elizabeth Arévalo, trabajo en nivel secundarias en Jalisco en Zapopan, uno de los municipios que conforman la zona metropolitana de Guadalajara. Leí gratamente su colaboración sobre los Consejos técnicos escolares y Quiero comentarle lo siguiente. El regreso de la cultura escolar autoritaria y el silenciamiento de los maestros ha sido tan marcado como muestran los siguientes ejemplo: 

1) La primera indicación que recibimos al iniciar el lunes 12 de agosto la primera fase de los CTE, fue no comentar nada que no viniera en la guía de trabajo. En esta guía se menciona que las reformas hechas al art. 3° Constitucional servirán para mejorar la calidad de la educación y cuando algunos docentes quisimos comentar que ahí no estaban mencionando lo de la permanencia o la autonomía de gestión, inmediatamente
los directivos nos pidieron callar y limitarnos a hacer lo que se establecía en la guía, porque esas eran las órdenes que ellos habían recibido en el mismo curso dado a los directores cuando quisieron expresar sus inquietudes, se les mandó callar y obedecer. es decir, se nos impidió socializar cualquier problemática educativa que no se encuentre dentro de lo que la SEP marca. 

2) Y en el colmo de la imposición y el abuso e incluso del absurdo
pedagógico, se ha obligado a los docentes que tenemos clases en la mañana y en la tarde a asistir en ambos turnos exactamente al mismo curso, a repetir en la tarde lo que ya hicimos en la mañana. Y aún violando la ley laboral, a los docentes que no tenemos plaza completa y nos han repartido las horas en mañana y tarde, algo común en secundarias porque la SEP no asigna plazas jornada, se nos ha obligando a asistir en ambos turnos de 8 a 10 horas diarias de lunes a viernes, más allá de nuestra jornada laboral; bajo la advertencia de que si no asistimos 
habrá sanciones para quienes no acaten la orden (nunca dijeron las sanciones), sin importar si no podemos asistir porque tenemos otro trabajo, el caso de muchos docentes, para cubrir nuestras necesidades económicas.
Se les ha indicado a los directores que si éste último fuera el caso de algunos docentes, se nos pida optar por renunciar a la docencia, porque es obligatorio asistir a este curso de CTE y a todas la reuniones mensuales de los CTE. Como si no fuera la SEP
la culpable de no asignar plazas jornada en secundarias y obligarnos a buscar un segundo empleo algunos días de la semana; porque nadie con el pago de 10 o 15 horas semanales puede  sostener a su familia, ni con los 8 mil pesos mensuales de una plaza de primaria.

En los casos en que hemos pedido al supervisor o al representante de la Secretaría de Educación, enviados para monitorear que cumplamos con el esquema impositivo, que nos muestren el sustento jurídico para la violación a estos derechos laborales, aseguran que al aceptar nuestro nombramiento como docentes, es nuestra obligación cumplir con toda disposición emanada de la SEP y que ya que esa fue la orden que se recibió desde "arriba", debemos cumplirla o atenernos a las consecuencias. Este pareciera ser el sustento jurídico, el autoritarismo, la imposición, la amenaza.

Y por supuesto que los planes de mejora que se están elaborando en estos días en los CTE, tienen la característica de partir de considerar la escuela una isla, porque no se consideran las causas reales debidas al contexto socioeconómico, ni local, estatal regional y menos nacional. Desde la óptica de quienes diseñaron este pésimo curso, el deterioro y la mejora de la escuela es el producto de la voluntad de los profesores. El profesor es el responsable de lo malo y bueno. Si el profesor empeña toda su voluntad entonces se producirá la calidad educativa; no importa la pobreza, el hambre, la desintegración familiar, la descomposición social, etc.,etc. 

Espero sean útiles estas líneas. Gracias. Silvia Arévalo

No hay comentarios: