Escuelas
normales ¿Parálisis y resignación?
Luis
Hernández Montalvo
“Entendemos
por formación inicial de un maestro la preparación escolarizada que recibe
antes de incorporarse al trabajo docente, misma que representa la base de todo
el proceso formativo que habrá de vivir durante su ejercicio profesional…la
magnitud de un subsistema de formación de docentes deberá estar siempre en
relación directa con las dimensiones del sistema educativo para el que forma a
los maestros…” Ramiro Reyes Esparza Rosa, Zúñiga Rodríguez, Diagnóstico del
Subsistema de Formación Inicial, Fundación SNTE para la cultura del maestro
mexicano, 1994.
Ignacio Manuel Altamirano |
Ya ha transcurrido casi un
mes desde que fueran emitidas las Directrices para mejorar la formación de los
docentes de educación básica, por parte del Instituto Nacional para la Evaluación
de la Educación INEE ¿Cuál ha sido hasta ahora la reacción de los formadores de
las escuelas normales?
Intente buscar una respuesta
con algunos profesores de escuelas normales en lugares tan lejanos como Baja
California Sur y esto fue lo que opinó uno de ellos:
“En términos generales la
han tomado con escepticismo los menos, y con cierta resignación la mayoría”. Del estado de Veracruz; un grupo de
profesores agrupados en el Colectivo: “Insurgencia
Magisterial”; pero fundamentalmente egresados de varias instituciones
formadoras de docentes, emitieron una convocatoria para la realización de un “Foro para la discusión pública para
integrar una respuesta colectiva a los lineamientos presentados por el INEE
para regular la formación de maestros de educación básica”.
¿A quiénes convocan estos
profesores de educación básica? Ellos lo
señalan: “a educadores, estudiantes, investigadores, organizaciones de la
sociedad civil e interesados en la defensa de la Educación pública”
El maestro Francisco de Baja
California opina que este tipo de foros serán necesarios para que el gremio se
exprese y dejemos atrás las inercias burocráticas. ¿Qué veo en mi entorno?
Veo la apatía y desaliento
de los profesores formadores de docentes; advierto la falta de liderazgos
académicos que convoquen y organicen a los miembros de las comunidades
normalistas. Las escuelas normales se encuentran en un estado de postración y
parálisis que les impide reaccionar institucionalmente frente a los nuevos
retos y frente a la profunda reforma esbozada en las Directrices para mejorar
la formación inicial de los docentes de educación básica.
Los controles burocráticos
niega la posibilidad de que los profesores de las escuelas normales puedan insertarse
en un debate público con capacidad de propuesta. La burocracia tiraniza a las
instituciones de formación docente inicial y esto incluye tanto a las 449 escuelas
normales, públicas y privadas como a las 76 Unidades y 208 subsedes de la
Universidad Pedagógica Nacional; pero también incluye a las 695 Instituciones
de Educación Superior –públicas y privadas- encargadas de impartir licenciaturas
de formación docente; ocasionando la postración del docente, y la frustración
de los pocos proactivos.
El reto es romper o, por lo
menos, inhibir la verticalidad de la actual gestión de las Instituciones
Formadoras de Docentes. Por ahora queda en el aire la pregunta ¿Cómo lograr la
idoneidad de los docentes de educación básica que ahora evalúa el INEE para el
ingreso al Servicio Profesional Docente? Y aún algo más, ¿Cómo insistir en la
evaluación de un perfil docente que aún no se ha formado en ninguna de las
instituciones de formación docente inicial?
Puedo equivocarme en mi percepción
sobre las instituciones formadoras de docentes, pero ya estamos a mitad del
plazo decretado por el INEE: “Las autoridades educativas tienen 60 días
naturales para responderlas”. Las Directrices para mejorar la formación inicial
de los docentes de educación básica, no pretenden consultar a los formadores y
mucho menos a los profesores de educación básica; de lo que se trata es de
llamar la atención de la SEP y de los gobernadores de los estados a los que se
les impuso un ultimátum sobre la necesidad de transformar a las escuelas
normales, a la UPN y a las IES que imparten licenciaturas de formación docente
a través del establecimiento, -entre otras medidas-, la creación de un tronco
común de formación docente inicial.
¿En qué momento de la
historia de la educación pública, las escuelas normales dejaron de ser las
únicas instituciones especializadas en la formación docente inicial de los
maestros de educación preescolar, primaria, secundaria, educación física y
educación especial? Los datos registrados en las Directrices muestran a que
nivel llegó, -en poco más de dos décadas-, el desmantelamiento de las escuelas
normales para darle paso a otros proyectos de formación.
Es verdad que el INEE no
convoca a las Instituciones de formación docente inicial; también es cierto que
las Directrices del INEE excluyen de la discusión a los formadores y tal vez
por eso, iniciativas como la que se han impuesto los profesores veracruzanos
adquieren una relevancia especial en estos días de incertidumbre y de disonancias
en los aparatos burocráticos de la SEP, el INEE, la Coordinación Nacional del Servicio
Profesional Docente CNSPD y los conflictos que se registran en las
administraciones locales por falta de liderazgos académicos.
Tengo confianza que los
profesores en Diálogo, reunidos este fin de semana en Torreón Coahuila, emitan
algún resolutivo especial y convoquen al magisterio a debatir las implicaciones
de las Directrices del INEE. No podemos esperar mayor compromiso del SNTE en
sus distintas vertientes, que también guardan un silencio cómplice. ¿Y las aguerridas
Escuelas Normales Rurales? A continuación, podrá descargar Las directrices para
mejorar la formación inicial de los docentes de educación básica y la
Convocatoria al Foro de los profesores de Veracruz, este 14 de octubre a partir
de las 11 de la mañana, en la Normal Veracruzana (8 de octubre de 2015).
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