Era emocionante, observar que la obra educativa de José Santos Valdés se convertía en una corriente de pensamiento filosófico. Ahí de manera práctica se dieron los principios de "EDUCAR CON EL EJEMPLO".
Todos sus ex alumnos y los que no lo fueron, conocedores de su comportamiento pedagógico, puntuales en el acto como lo era él. En punto de las 10 de la mañana en la plazuela Juárez de Lerdo, en el busto erigido a su memoria, frente a lo que fue su domicilio por la Calle Rayón inicia el primer evento convocado para este día.
La ceremonia cívica. Excelente convocatoria que habla bien de todos los que se echaron a cuestas organizar los diferentes eventos del 108 aniversario de su natalicio. El discurso del siempre inquieto Profesor Pedro Medina Calderón que rescata para el momento actual la vigencia del pensamiento de José Santos Valdés, el debate filosófico, la defensa de la Escuela Pública, el artículo tercero constitucional, los errores de las reformes cupulares que no prosperan si no se convence a los maestros como actores principales de los procesos y la práctica escolar al servicio del pueblo para ganarse el consenso y el apoyo de la sociedad.
El rescate de la experiencia del Profesor Valdés en su folleto "MOTIVOS SOCIALISTAS DE LA EDUCACIÓN", donde los maestros pagaron con sus orejas y las maestras con sus senos el dogmatismo y la hipocresía callista al abordar demagógicamente los temas de religión y educación. Posteriormente en el Teatro Centauro de la misma Ciudad en la presentación de los tomos XIV, XV y XVI de su vasta obra escrita, para culminar con un festival artístico con la participación de las Escuelas Normales de Nieves; Zacatecas, de Lerdo; Durango y de Torreón; Coahuila. Un teatro con presencia y olor a normalismo, que parecía reclamar la importancia de la sobrevivencia de una de las columnas vertebrales de la educación en México y que está seriamente amenazada por el neoliberalismo; normalismo de experiencia y presencia de estudiantes jóvenes que se llevaron de manera práctica una experiencia pedagógica inolvidable, que ojalá rescate la filosofía del maestro José Santos Valdés, de educar con el ejemplo, pensamiento pedagógico crítico y entender que lo que único y que realmente educa es el trabajo. —
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