Sin
definición política; el SNTE se mueve
Luis
Hernández Montalvo
“A levantar
ideales!!! A construir conceptos!!! No más estar a la expectativa de un líder
que no defiende nuestros momentos!!! Creo en una corriente fuera de Nueva
Alianza? No estoy de acuerdo con la manera de operar!! Creemos una corriente
alterna!!!!"
Mónica Arriola
Con el encarcelamiento de la señora Elba Esther Gordillo
Morales los distintos analistas políticos consideraron que el SNTE había
recibido un golpe que prácticamente lo haría desaparecer como sindicato y como
grupo político.
No fue así; conforme transcurrieron los primeros minutos
de aquel fatídico 26 de febrero para la Presidenta del CEN del SNTE, las cosas
cambiaron, para ella, para sus familiares y para sus amigos a los que
representaba en el SNTE.
Los Secretarios
Generales de las Secciones del país pasaron a ser controlados por los
gobernadores. El Consejo Nacional reunido en pleno decidió destituir a su
Presidenta Nacional y sustituirla por otro, ¿Qué establece la legalidad
estatutaria en casos como el señalado?
Elba Esther Gordillo fue condenada –antes que las
autoridades judiciales lo hicieran,- por sus propios compañeros, amigos y
seguidores. La traición y la deslealtad se impusieron sobre cualquier sentido
ético de solidaridad gremial e incluso familiar. A partir de ese momento su destino
y el de su familia quedo en manos del poder ejecutivo de la nación.
Un nuevo personaje se sentó en la silla de Elba Esther,
un nuevo Presidente que no llegó mediante la voluntad del voto universal de los
trabajadores; sino mediante un golpe de mando de quien realmente ejerce el
control del Sindicato y los destinos de los trabajadores.
Fue la voluntad del Presidente en turno la que impuso al
nuevo Presidente del CEN del SNTE; así llegó Juan Díaz de la Torre y como sus
antecesores, inició la ruta de construir su propio liderazgo, o como dicen
entre ellos, “sus momentos”.
Luego vendría una recomposición del Comité Ejecutivo
Nacional del SNTE y durante más de un año, se fueron conformando tres grupos
con intereses más o menos definidos.
Suele hablarse del Grupo Jalisco, el encabezado por el
señor Juan Díaz de la Torre, lo acompañan José García Mora, quien forma parte
del Colegiado Nacional de Asuntos Laborales y Negociación, quien se perfila
como el sucesor del actual Presidente del SNTE, Leopoldo Mora también forma
parte de este grupo y lo ubican como un activo académico, el vínculo con la
Universidad Autónoma de Guadalajara, donde un grupo de académicos buscan un
nuevo perfil sindical para el SNTE, para transformarlo en un sindicato de
servicios; aquí también es ubicada Leticia Gutiérrez .
El segundo grupo, se define por cierta fidelidad a la
señora Elba Esther Gordillo y lo integran, entre otros: René Fujiwuara Apodaca,
ex yerno de la profesora e integrante del Colegiado de Formación Sindical; que
junto a Aquiles Cortes López, del Colegiado de Organización, Moisés Armenta, de
Finanzas también en este grupo.
Hay otro grupo que no se le conoce definición política,
pero que se mueve con cierta libertad en el interior del SNTE y tienen algunos
aspirantes a la disputan del poder y control del sindicato. Por este grupo, se
localiza a Luis Manuel Hernández de Guanajuato; Silvia Luna de Aguascalientes, aquí
también se inscriben alguno que otro ex Secretario General del CEN del SNTE y
de las secciones sindicales o como el Secretario General de la Sección 60 del
Politécnico; quien se le ve muy activo en los asuntos nacionales.
En el grupo de “los no definidos”, está el Profesor
Carlos Ariel Moreira Valdés; coordinador del Colegiado Nacional de Organización
y fuerte aspirante a la Presidencia del CEN del SNTE; hermano del ex gobernador
por Coahuila Humberto Moreira y del actual gobernador Rubén Moreira de amplia
militancia priista. Otro aspirante es el hijo del cacique priista de Nayarit
Liberato Montenegro, su hijo, Gerardo Montenegro Ibarra.
Estos movimientos hacen suponer a varios observadores del
CEN del SNTE de un hipotético Congreso Nacional Extraordinario. El resto de los
miembros del CEN del SNTE, buscan justificar su permanencia a través de la
presentación de “proyectos sindicales” que nadie atiende. Frente a todo lo anterior,
nos preguntamos: ¿Quién procesa los cambios en el CEN del SNTE? ¿Qué intereses
se mueven en torno al SNTE?
Dos son los caminos para acceder al poder sindical; por
un lado, los delegados del CEN del SNTE en cada estado y sección sindical
cabildean con los secretarios generales seccionales para hacerse de un capital
de delegados.
El otro camino, el más seguro y menos riesgoso tiene que
ver con las relaciones con el gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto, pero
también con los gobernadores a través de la CONAGO, quienes vienen jugando un
papel importante en el SNTE desde aquel 26 de febrero de 2013.
Aquí se inscribe también la reciente detención de la ex
Secretaria General de la Sección XV del SNTE en el estado de Hidalgo; acusada
del delito de robo a los agremiados de 123 millones 965 mil pesos. Mirna García
López paga una factura con el actual Secretario de Gobernación y ex Gobernador
de aquel estado; por haber apoyado en las pasadas elecciones a Xóchitl Gálvez,
candidata del PAN.
Y para que no duden; en el SNTE se mueven los personajes
más disímbolos, ahí está el caso de la ex Secretaria General del Partido Nueva
Alianza, destituida mediante un acuerdo de los presidentes del CEN del SNTE,
Presidente del Partido Nueva Alianza y la Secretaría de Gobernación. Ahora, Mónica
Arriola –la influyente electora en el nombramiento de varios Secretarios
Seccionales en los últimos congresos- se prepara a construir una corriente
alterna, una fuerza paralela al Partido Nueva Alianza. ¿Para qué? (18-Agosto,
2014)
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